Suegra vino a pasar la Navidad por estos lados y de entradita no le gustó la ciudad. La encontró vieja fíjense. Y vieja es, considerando que sus orígenes se remontan a principios del siglo XVII. No dijo sucia, pero seguro que lo pensó en cuanto puso uno piececillo en el metro. Todo se solucionó con un buen paseo de compras por Chinatown y las encandilantes luces de Times Square. Santo remedio.
Es que esta NY es una chica muy coqueta y no le gusta darse con todos a buenas y a primeras. Pero cuando saca su artillería no hay como resistirse. Por eso estoy más de acuerdo con quienes protestan por el slogan chileno para promocionarse en el extranjero: “Chile, All Ways Surprising”. Vayan a lavarse la boca con jabón. Porque si NY no dice esas cosas de sí misma, que nadie lo diga.
Y que alguien me venga a discutir que no es cierto. Sobre todo hoy mismo, cuando mientras escribo se está realizando el 7º Paseo/Viaje Anual en Metro Sin Pantalones (traducción libre, pero bastante apegada a su nombre real). Es la combinación de locura y organización que siempre sorprende. Porque la gente está citada a las 3 de la tarde, con puntualidad, en una determinada estación de metro para ser organizada en grupos a cargo de un líder. Sólo una vez dentro del metro deben sacarse los pantalones para quedar en ropa interior (se ruega no usar colaless ni similares para que nadie se sienta ofendido y se invita a usar dos capas de ropa interior si los hace sentir más cómodos) y bajarse en la estación de metro que, con anterioridad, su líder les habrá indicado. Incluso se dan consejos como qué decir en caso de que alguien les pregunte qué están haciendo o por qué están sin pantalones. “Me estoy poniendo cómodo” y “Sentía que hoy debía salir sin pantalones”, son algunas de las sugerencias.
“Only in NY”. Tomen ese slogan. Y es de lo más pegador además, miren que lo escucho tupido y parejo. La gente lo dice todo el tiempo en las series y la vida real (la tele y el metro son mis principales fuentes de información en caso de que alguien considere mi afirmación estadísticamente cuestionable).
Y para qué hablar del simple “I love NY”. No hay suficientes tazones, poleras, ceniceros, gorros y tonterilla suficiente con la gastada fracesilla. Los turistas no se cansan de llevarla y los “artistas emergentes” de hacer reinterpretaciones gráficas y conceptuales del asunto. Pero qué más se puede hacer con la Gran Manzana que puede ser como la fierecilla domada de las ciudades pero por eso uno la quiere tanto. Aunque a veces haya que escudriñarla y buscarle el lado.
Es que esta NY es una chica muy coqueta y no le gusta darse con todos a buenas y a primeras. Pero cuando saca su artillería no hay como resistirse. Por eso estoy más de acuerdo con quienes protestan por el slogan chileno para promocionarse en el extranjero: “Chile, All Ways Surprising”. Vayan a lavarse la boca con jabón. Porque si NY no dice esas cosas de sí misma, que nadie lo diga.
Y que alguien me venga a discutir que no es cierto. Sobre todo hoy mismo, cuando mientras escribo se está realizando el 7º Paseo/Viaje Anual en Metro Sin Pantalones (traducción libre, pero bastante apegada a su nombre real). Es la combinación de locura y organización que siempre sorprende. Porque la gente está citada a las 3 de la tarde, con puntualidad, en una determinada estación de metro para ser organizada en grupos a cargo de un líder. Sólo una vez dentro del metro deben sacarse los pantalones para quedar en ropa interior (se ruega no usar colaless ni similares para que nadie se sienta ofendido y se invita a usar dos capas de ropa interior si los hace sentir más cómodos) y bajarse en la estación de metro que, con anterioridad, su líder les habrá indicado. Incluso se dan consejos como qué decir en caso de que alguien les pregunte qué están haciendo o por qué están sin pantalones. “Me estoy poniendo cómodo” y “Sentía que hoy debía salir sin pantalones”, son algunas de las sugerencias.
“Only in NY”. Tomen ese slogan. Y es de lo más pegador además, miren que lo escucho tupido y parejo. La gente lo dice todo el tiempo en las series y la vida real (la tele y el metro son mis principales fuentes de información en caso de que alguien considere mi afirmación estadísticamente cuestionable).
Y para qué hablar del simple “I love NY”. No hay suficientes tazones, poleras, ceniceros, gorros y tonterilla suficiente con la gastada fracesilla. Los turistas no se cansan de llevarla y los “artistas emergentes” de hacer reinterpretaciones gráficas y conceptuales del asunto. Pero qué más se puede hacer con la Gran Manzana que puede ser como la fierecilla domada de las ciudades pero por eso uno la quiere tanto. Aunque a veces haya que escudriñarla y buscarle el lado.
5 comments:
Shocking lo del día sin pantalones.
Si ya no hallan qué inventar!
Creo que el slogan perfecto para los chilenos es VAYANSE A LAVAR LA BOCA CON SAPOLIO, jajajajajaja y despues de eso QUEDENSE BIEN CALLADITOS JAGUARES AL P....
Interesante eso de sacarse los pantalones, me gustaría que se hiciera en Suecia para verle a los suecos.....verle la timidez a donde les llega.....
Que entretenido!!! algún día ire para allá.
Cuenta conmigo a las tres en punto!
con sapolio! eso era lo que quería decir...
Excelente Blog, no pude parar hasta leerlo enterito.
El Pineda escritor está quedando chico al lado tuyo.
Ya estoy ansioso de leer el próximo post.
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